Feliz Navidad

25 de noviembre y un mes tan solo para que comience la navidad. "25 ya es navidad y todos juntos vamos a brindar." Pues sí, la navidad se acerca pero cada año y una vez más parece que la vamos adelantando poco a poco. Ya empiezan los preparativos para estas fechas tan esperadas por mucha gente.Pero, ¿qué es la navidad? la navidad simboliza el nacimiento del "niño Jesús". Son unas fechas celebradas por todos los cristianos. Es la época de estar feliz, de que la familia se reúna, de ponerse las botas y de derrochar dinero. Para los niños es genial, tendrán unos días de vacaciones aparte de muchos regalos. Los jóvenes la esperan ansiosos por el mismo hecho de pasar unos días tranquilos y como no...esperan la gran noche vieja. Los universitarios en cierto modo no deseamos tanto esas vacaciones como los demás. No lo hacemos por una sencilla razón: a la vuelta de las "vacaciones" llegan los exámenes y esas estupendas "vacaciones" las tendremos que pasar estudiando como locos. Los adultos  disfrutan de las grandiosas comidas navideñas y los abuelos solo desean reunirse con su familia y contar esas historias de antaño. Pero la navidad no es algo que todo el mundo celebre.

Como he dicho anteriormente, la navidad cada vez comienza antes a prepararse. Yo creo que dentro de poco como sigamos a esta paso la acabaremos empezando a preparar a finales de agosto principios de septiembre. Es ahora cuando las calles empiezan a adornarse de luces navideñas. Los escaparates se llenan de posibles regalos y adornos navideños. En todas las ciudades se incluye también ese árbol de navidad tan gigante que casi podría verse desde cualquier punto de la ciudad. En los comercios empiezan poniendo villancicos y en la tele es la hora de empezar con la programación de películas navideñas recopiladas hasta el día de hoy. 

En los hogares los niños, si los hay, reclaman el árbol de navidad. En mi caso, será mi madre la que lo reclamará y se empeñará en colocar en el salón justo enfrente de la ventana para que desde fuera pueda verse con las luces encendidas. Empiezan a aparecer por el salón grandes cajas llenas de adornos como las boas, las luces para colocar en el árbol, las bolas, los esprais para hacer con esas plantillas tan típicas los dibujitos en las ventanas, etc. En muchos hogares se suele poner el belén y gracias a que en la mía no se pone. En definitiva, la mayoría de las casas están desbordadas de espíritu navideño. (Excepto en esas casas en las que no celebran la navidad)

Por supuesto, las postales no pueden faltar. Toca escribir a toda la familia y sobre todo a aquella familia que vive lejos y no puede disfrutar de estas fechas con nosotros. Y no solo a la familia sino que a los amigos que viven lejos también. En las familias en las que hay niños pequeños no pueden faltar esas famosas postales hechas en el cole. Utilizan cartulinas de colores y brillantina a punta pala. Son esas postales feas que con cariño se ponen en el lugar más visible de toda la casa. 

La lotería. El mayor derroche de la navidad. Ese juego absurdo al que todo el mundo juega. Probabilidades de ganar mínimas, una entre un billón. Además, la gente no suele conformarse con un solo décimo sino que compran muchos  de diferentes lugares y diferentes números con la esperanza de ganar algún premio. De lo que nadie se da cuenta es de que si dejaran de gastar esa bestialidad de dinero en decimos de los que lo más seguro no ganen nada, se ahorrarían muchísimo dinero. Porque no es solo un año sino que compran año tras año. Y si pensamos un poco con la cabeza...si fuéramos guardando en un lugar seguro todo aquel dinero que gastarían en décimos, al de muchos años habrían conseguido ahorrar casi lo que equivaldría a un premio de los que podrían optar a ganar si jugaran a la lotería. Pero en fin, la gente se deja embobar por el calvo de la lotería así que es absurdo discutir sobre este tema. 

Y ¿que me decís de las comidas navideñas?. La gente compra muchísima comida para estas fechas. Aprovechan para comprar toda aquella comida cara que no podrían permitirse comprarla habitualmente. Se alimentan como cerdos. Gastan mogollón en comida que tienen que comer durante varios días de ella porque sino serían incapaces de acabarla el día en el que se sirve. Y ¿cuál es la gran conclusión de esto? sube el colesterol, engordan como gorrinos y todo ¿para qué? para después gastarse otra burrada en gimnasios a los que tienen que acudir para volver a estar como antes y no como unas bolitas de navidad. 

Finalmente, llegan los reyes magos. Yo creo que es lo único positivo que podría verle a la navidad. Son los niños quienes lo disfrutan más. Son los más inocentes de todo esto. Ellos no compran lotería, ni comida cara. Ellos solo disfrutan de sus vacaciones navideñas, de adornar en familia la casa y de esperar ansiosamente esos regalos que los reyes van a traerles. La noche más esperada de todo el año. Ellos se encargan de ponerles las galletas y el vino para los reyes y el agua y pan para los camellos. Son ellos los que se pasan la noche en vela intentando pillar a los reyes entrar por la chimenea o por la ventana. Y son ellos quienes a las siete de la mañana están dando guerra a sus padres para ir a abrir los regalos. Regalos que desemvolverán ansiosos y que finalmente disfrutaran de ellos durante los próximos días mayormente. 

Pero..y ¿qué pasa con toda esa gente qué no tiene dinero o que no tiene medios para celebrar la navidad? Todos esos pueblos en los que están muriéndose de hambre y en lo último que pensarían sería gastarse el dinero en chorradas como la lotería o comida y regalos caros. Ellos solo desearían un buen plato de comida y poder alimentarse habitualmente. Pero claro, todos somos muy buenos ¿verdad? Jesús que está con nosotros es muy bueno ¿verdad? Sí, claro. Por eso el Vaticano, el Papa, ese hombre tan bueno y tan generoso se encarga de alimentarles y de darles un hogar ¿verdad? A ver si todos empezáis a abrir un poco los ojos y a ver que el Papa es solo un señorito ricachón que acumula millonadas y no suelta ¡ni un duro! Y ale, FELIZ NAVIDAD